7Información financiera

INTRODUCCIÓN

En 2019, los ingresos de explotación del perímetro de gestión de Saba se sitúan en los 296 millones de euros (+33%), mientras que el EBITDA de gestión alcanza los 138 millones de euros (+29%), con un margen del 42%, que sigue siendo de los más elevados de todo el sector a nivel internacional. El significativo incremento se explica por ser 2019 el primer ejercicio en el que las nuevas sociedades incorporadas al perímetro de Saba como consecuencia de la operación de crecimiento cerrada en diciembre de 2018 tienen impacto en la cuenta de resultados consolidada del Grupo.

Las principales magnitudes de Saba reflejan, por una parte, un comportamiento estable del negocio y, por otra, los esfuerzos realizados por el conjunto de la organización con el fin de incrementar la eficiencia operativa del negocio, implantar iniciativas que permitan a la compañía convertirse en referencia del sector, con particular énfasis en los nuevos sistemas de soporte, nuevas tecnologías y eficiencia energética, además de nuevas fórmulas e iniciativas comerciales, y en desarrollar una gestión activa de los contratos, enfocándose hacia el crecimiento. En iniciativas comerciales destaca la puesta en marcha de acuerdos en el ámbito de los nuevos usos y hábitos de movilidad (sharing, distribución urbana, microdistribución y carga eléctrica, entre otros).

Saba invirtió 37 millones de euros en el ejercicio de 2019, de los que 13 millones se destinaron a proyectos de expansión. Destacan los 4 millones de de euros para el cierre de la operación de crecimiento culminada en 2018 y que permitió la entrada en cuatro países europeos.

La evolución del Grupo a corto y medio plazo viene condicionada por el contexto macroeconómico de cada país donde opera, junto con factores locales cuya incidencia es dispar. A estas variables hay que añadir, como factor sobrevenido en 2020, la pandemia mundial ocasionada por la Covid-19. Saba, en este ámbito, está realizando una supervisión constante de la situación y de los eventuales impactos, tanto financieros como no financieros, que la crisis sanitaria pueda tener.

Como en ejercicios anteriores, Saba continúa con sus medidas de optimización y gestión del gasto. La adecuación de los canales de comercialización, con especial enfoque en la vía digital, así como de los productos a las demandas actuales, confirma una línea de trabajo orientada a la mejora continuada que debe traducirse en una mayor rentabilidad. Las tradicionales políticas de crecimiento selectivo, basado en criterios de rentabilidad y seguridad económica y jurídica, así como las acciones orientadas a la gestión eficiente de las explotaciones y la innovación tecnológica continúan formando parte de los vectores de actuación de Saba.

Ingresos por país

a 31 de diciembre de 2019

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